Sharon Steves (Hilary Swank) es una peluquera, que lucha por sacar adelante su negocio -sin mucho éxito- en un pequeño pueblo de Kentucky. Por ello, comienza a beber sin control, por lo que acaba en Alcohólicos Anónimos. Sin embargo, descubre una nueva oportunidad en la vida cuando conoce a Ed Schmitt (Alan Ritchson): un viudo que trabaja duro para sacar adelante a sus dos hijas. Mientras la hija menor del hombre espera un trasplante de hígado, Sharon hace todo lo posible por ayudar a la familia a la que acaba de conocer y está dispuesta a mover montañas para conseguirlo, buscando la redención.