Tras el fracaso de un álbum, la envejecida estrella del rock John Allman (Harry Connick Jr.) decide tomarse un tiempo. Sin más preámbulos, compra una remota casa en la isla mediterránea de Chipre, donde quiere buscar nueva inspiración y donde casi encontró la felicidad de joven: antes de ser famoso, se enamoró de la bella chipriota Sia (Agni Scott), que un día desapareció sin dejar rastro. Ahora se reencuentra por casualidad con ese amor de infancia y el viejo fuego vuelve a encenderse, pero surgen algunas adversidades, por lo que John tiene que contar con el apoyo de la vivaracha Melina (Ali Fumiko Whitney).