Crítica de SensaCine.com para Fallen Leaves: Una variación de la sinfonía de Kaurismäki

Aki Kaurismäki lleva casi cuatro décadas haciendo, básicamente, la misma película. Su universo particular se desarrolla a través de historias de personas solitarias, perdedoras y alcohólicas que se mueven en lugares decadentes, grises y rodeados de fantasmas que tienen sus mismos problemas. Son personajes con una triste existencia que, sin embargo, siempre encuentran una razón más para vivir. El director tiene una sensibilidad especial para mandar un mensaje de esperanza en los lugares más sombríos.

Fallen Leaves sigue esta tendencia. La cinta se puede resumir en "chico conoce a chica", pero son dos perdedores natos que, tras un primer encuentro, pierden el número de teléfono. La posibilidad -o no- de encontrarse hará de sus vidas algo mejor. Un bonito relato como muchos otros que hemos visto en la filmografía de Kaurismäki, pero no por ello carece de belleza.

Kaurismäki, director incombustible, ofrece con Fallen Leaves una variación de la gran sinfonía que es su obra. Una barbaridad de película.