La vida de Jessie (Nicky Whelan) se ha ido completamente al traste, ahora mismo debería estar disfrutando de su luna de miel. Sin embargo, al final su boda no se celebró y ella no es capaz de superarlo. Sus amigos, en un intento, de animarla la incitan a hacer el viaje de novios con ellos, ya que está todo pagado. Por ello, se van todos juntos a una isla paradisíaca, en principio todo será disfrute hasta que se vean acosados por un tiburón que no para de asesinar a turistas y ellos serán su próxima presa.