Blaga es una profesora jubilada de 70 años de moral firme que acaba de perder a su marido. Complementa su cortísima pensión con algunas clases privadas que realiza a estudiantes, como una ucraniana que ha huído de la guerra y espera adquirir la ciudadanía búlgara. Blaga había ahorrado duramente para poder costear la tumba de su marido, que ha conseguido negociar con un funcionario del cementerio, pero sus ahorros se desvanecen por culpa de unos estafadores telefónicos. Desesperada, arruinada y sin poder dar una despedida como es debido a su difunto esposo, la brújura moral de esta septuagenaria empezará a perder el Norte.