Irma y Olga son dos jóvenes bailarinas que intentan mantenerse firmes en el exigente mundo del ballet de Ámsterdam en la década de 1970. Sin embargo, Olga comienza a destacar y se presenta como la nueva gran estrella del Royal Ballet. Pronto descubre el lado oscuro de su talento e Irma tiene que observar cómo su mejor amiga sucumbe a la presión de actuar y se pierde en la vida nocturna. Solo queda la danza cuenta la historia de un talento excepcional, pero sobre todo la de una amistad dispuesta a todo.