Grisha es un joven ruso que vive tranquilo en su pueblo, tiene dieciséis años y es de rostro afable y sencillo. Su gran pasión es su adorada Sonya, sin embargo, se tendrá que separar de ella para servir al comandante Alexander Vasilyevich Suvorov. Grisha empezará un largo viaje con su nuevo mentor y tendrá innumerables aventuras que le hará crecer como un pequeño héroe. En su periplo llegan a Suiza donde Surovov se convierte en una leyenda por sus acciones y por sobrevivir a las intrigas a las que se ven sometidos.