En un lejano planeta viven dos familias de marcianos: los Smeds y los Smoos. Los Smeds duermen en camas, tienen pies de pato y pelos raros, juegan en el agua, beben leche rosa y comen pan marrón, mientras que los Smoos llevan zapatos, duermen en agujeros, les gusta saltar todo el rato, beben té negro y comen estofado verde. Los Smeds y los Smoos no se llevan bien; viven separados y nunca juegan juntos, ¡está prohibido! Janet es una Smed que un día se aburre de jugar en el agua; Bill es un Smoo que un día se cansa de saltar por la colina. Una mañana se encuentran en el Bosque Encantado y se enamoran. Cuando sus familias se enteran, se enfadan muchísimo, y les recuerdan que nunca nunca NUNCA deben jugar el uno con el otro. Pero Bill y Janet quieren estar juntos y siguen reuniéndose en secreto hasta que, finalmente, deciden huir del planeta.