Durante el golpe de Estado del 23 de febrero de 1981 en España, un grupo de abogados laboralistas comprometidos políticamente se refugian en una casa aislada, inmersos en la incertidumbre y el miedo.
Atrapados entre las ganas de protegerse a sí mismos y la urgencia de actuar en defensa de la joven democracia, se enfrentan a una serie de dilemas éticos y estratégicos. Sus discusiones giran en torno a si deben huir del país, permanecer escondidos esperando el desenlace, o tomar medidas arriesgadas para influir en el desarrollo de la crisis.