No serás un extraño es la primera película como director de Stanley Kramer.
Olivia de Havilland y Robert Mitchum se preparon para interpretar a sus personajes atendiendo a ocho operaciones. Broderick Crawford atendió a una autopsia para su escena y se puso malo.
En 1955 estuvo nomiada al Óscar por Mejor Sonido y al BAFTA a Mejor Actor Extranjero porFrank Sinatra.