Cuando Ingrid dispara, sus víctimas no tienen idea de quién ha sido. Su habilidad para infiltrarse y desaparecer sin dejar rastro la convierte en una asesina implacable. Sin embargo, ese poder proviene de otro mundo habitado por criaturas, lo que la hace cada vez menos humana cada vez que lo usa.
Melville, un contrabandista que maneja mercancías extremadamente raras, quiere eliminar a un poderoso empresario rival que intenta arrebatarle el control del puerto, y sabe que solo Ingrid puede hacer el trabajo. Pero todo cambia cuando Melville descubre el secreto de Ingrid y su misteriosa conexión con el mar.