Este thriller de espionaje trata las proezas del señor Philip Kimberley (Michael Caine), un ex agente del Servicio Secreto británico (MI6) que abandonó su país en busca de nuevos horizontes. Tiempo después, vuelve a su ciudad de origen tras fingir su muerte. En Rusia, lugar al que decidió escapar, Philip quiso que le implantaran un nuevo aspecto físico, para que así, una vez la KGB le enviara de nuevo a Inglaterra para cumplir su última misión, pudiera recuperar unos importantes documentos guardados en las bases de la MI6 sin ser reconocido. Sabiendo que sus compatriotas, los británicos, lo creen muerto, Kimberley se hace pasar por un espía ruso. Con los archivos en mano y sirviéndose de su inteligencia, Philip hace que ambos bandos se enfrenten entre sí, siendo él, junto a su hija, el único que se salve de dicha batalla.