La película prometía: un caso de lucha contra una burocracia deshumanizada, crítica social sobre la explotación de los emigrantes... Pero El 47 se queda sin combustible porque multiplica hilos narrativos que no llevan a nada (el amigo del protagonista, la inadaptación de la hija, el conflicto laboral) y porque la sobrecarga de imágenes de archivo, mal seleccionadas cronológicamente, le dan un tono de pastiche peor que los No-Do de la época.
Una película fantástica, basada en hechos reales, que, a través de una sencilla historia, repasada la realidad de cientos de miles de españoles que fueron expulsados de sus tierras durante el franquismo. Eduard Fernández ha hecho el papel de protagonista brutal, siendo actor catalán, ha clavado el personaje de migrante, su acento "de fuera" es impecable.
Una película extraordinaria,de las que la mayoría de personas deberían ver para entender mejor que la migración y las carencias hacen de li imposible,posible. Esta muy bien dirigida,y las interpretaciones son sublimes. La fotografía es impecable y refleja con extrema realidad una época de una Barcelona que estaba por construir.