Opiniones sobre Siempre nos quedará mañana

Menuda CASTAÑA. Cumpliendo su cometido con la Agenda 2030. Un bodrio casposo en blanco y negro q se somete muy a los estándares y subvenciones de la comunidad europea.

Hay mucho de bueno en esta pelicula: las interpretaciones, la ambientación, la música, la elección del blanco y negro, el guión. Mucho. Pero sobre todo destaca por el enfoque que aporta mucho amor y humor a una historia de maltrato hacia una mujer que como tantas, se sacrifica día tras día por su familia en tiempos de posguerra.
Entre tanto goce y sufrimiento, me quedo con una escena: ella y él. Él , el bueno, un antiguo amor, compartiendo con ella chocolate. Cine en esencia.

SIEMPRE NOS QUEDARÁ MAÑANA-dos-
Siempre que una película se presenta como escrita, dirigida y protagonizada por un mismo nombre-hombree o mujer- son más las posibilidades de que el resultado resulte un algo estrambótico o una obra de arte –raras veces- que una obra medianamente aceptada en cuanto a público y crítica. Las circunstancias juegan un papel dominante: el interés de ciertos grupos (siempre existentes con más o menos influencias) políticos, sociales o ideológicos.
Esta vez la directora y guionista además de intérprete Cortellesi es seguro que se ha dejado empujar por la cresta de las olas de los movimientos del ambiente favorable del M-Too. Satirizando o caricaturizando lo que con mayor o menor fortuna y énfasis cada grupo de influencia vivió o inventó como situaciones ante las que surgió la reacción femenina (y masculina).
Cortellesi nos lleva a las largas colas para comprar en la Roma liberada y la gente con años recuerda el estraperlo, el racionamiento, las libretas de mes-créditos- de nuestra no tan reciente forma de vida con trabajillos complementarios como trabajar el ganchillo, tricotar, coser a máquina, poner inyecciones… La ilusión: emparentar con la burguesía…El fondo sonoro me sobrepasó. Rompe en su disposición tanto en ritmo como en volumen con el maltrato doméstico en la Roma del 46. El final sorpresivo desagrada, es otra cosa.