Enid y Rebecca, dos rebeldes adolescentes amigas desde hace años, no saben cómo pasar el rato ahora que ya han acabado los estudios de secundaria. Pese a sus tímidos esfuerzos por encontrar trabajo, a menudo acaban deambulando por las calles, escrutando el comportamiento de la gente que les rodea. Atraídas por los personajes excéntricos, suelen mirar los anuncios personales del periódico local. Enid llama al autor del anuncio más lamentable, un hombre solitario de cuarenta años, coleccionista de discos, y le invita a una cita a ciegas. Ambas acudirán al restaurante convenido para espiarle y saber cómo es su vida...
La obra trata ese paso a la madurez y a su vez esa soledad que a veces se padece. Rebecca es tranquila y afianzada en sus obligaciones, aceptando el absurdo de la vida y limitando sus hedonistas deseos para buscarse un futuro mejor, entregada al trabajo y a la independencia. Por otro lado su mejor amiga Enid, perdida y cínica. Se define como un espíritu punk rock revolucionario, inconformista y lejos de una vida típica. Critica a los insulsos que la rodean, preocupados por cosas triviales o actuando como pseudo-bohemios. Pero dentro de lo transgresora que ella misma se ve, realmente es falta de madurez y aceptación, siendo que su criterio y punto de vista es el único correcto según ella.
Y por otro lado vemos a Seymour, un adulto solitario y lejos de congeniar con nadie, coleccionista de discos e inteligente y culto. Seymour servía como fuente de burlas para las dos muchachas, pero Enid logra conectar con él, y encuentra una especie de figura paternal interesante y en la que se ve reflejada. Una persona que no encaja, inadaptada y arrogante.
Es una bonita obra sobre ese espíritu adolescente perdido y tratando de buscarse a sí mismo, y a su vez la de un adulto reincorporándose a una sociedad que no aprecia lo realmente bueno, solo lo popular.
Es una gran crítica al mundo actual, que olvida en cuanto tiene un nuevo héroe al que idolatrar, dejando solo los restos de lo que una vez fueron las bases de aquello. Una sociedad que ha perdido el respeto y que no mira más allá de ser guay. Una sociedad que no busca autocultivarse y que como la propia obra dice; "Dales una Big Mac y unas Nike y serán felices". Pero no todo el mundo es feliz con eso, hay gente compleja en constante búsqueda y tratando de construir cada día una versión mejor de ellos mismos.
Una bonita carta a esos marginados que rechazan lo guay y van a por lo auténtico.
La dirección es bastante buena, el manejo de cámara es correcto, los planos también, buena ambientación con escenarios bien adecuados al ambiente tibio y sin sentimiento que muchas veces quiere transmitir. El guión es genial, unos diálogos muy inteligentes y con un subtexto lleno de buenas ideas.
De todo el casting destaco a un Buscemi entregado y dando una actuación muy buena.
Buena película