Esta secuela del clásico navideño "Santa clausula" es una película que cumple con su propósito entretener a los espectadores en una tarde de navidad. El argumento gira en torno a que a Santa se le van a acabar los poderes y para que no se le agoten tiene 27 días para casarse y con la moraleja clásica como lo más importante: Santa Claus existe y que está siempre ahí.