Un matrimonio de fantasmas (Geena Davis y Alec Baldwin) contrata los servicios de Bitelchus (Michael Keaton), un especialista en asustar mortales, para que ahuyente a los nuevos propietarios de su querida casa Victoriana.
Tim Burton nos trae esta pintoresca película con aires de cómic y de maqueta, con unos decorados fantasiosos; el pueblo es artificioso pero se siente pulcro y de cuento, las casas tienen colores vivos y llamativos para destacar en la perfectamente cortada hierba que rodea y con una arquitectura imaginativa y brillante, desde los decorados de los interiores, hasta las estructuras de las casas o hasta la representación de ese purgatorio con motivos geométricos y una iluminación vivaz entre toda la penumbre que llama a ese giallo clásico.
Una historia al servicio de los niños y también de los adultos, dotada de un humor negro y escabroso, unos chistes con dobles significados bastante profundos y un subtexto marcado por la muerte (como la mayoría de obras de Tim Burton) y lo que esta representa, con sus incertidumbres y su oscuridad aterradora, pero con un mensaje positivista y que incita a no abandonar nunca la batalla, ya que como en la propia película dicen; "Estar muerto no resuelve nada".
Se nota el cariño que le pone a sus películas, es un derroche de talento e imaginación, una oscurantista e inspirada prosa cinematográfica que bebe mucho de la 'Divina Comedia' de Dante y de 'La Muerte Roja' de su tan querido E. A. Poe.
Ahora toca hablar de un hasta entonces desconocido Michael Keaton, apabullante, nos brinda un personaje para el recuerdo, con una puesta en escena espectacular, desde el maquillaje, la indumentaria, hasta la tumba de la que sale; todo es perfecto. Un bioexorcizador, "...con estudios de música y de empresariales por la Universidad de Havard, además de haber visto unas 167 veces "El exorcista" de William Friedkin y ello sin contar que está muerto...", pervertido y con 600 años de abstinencia sexual a sus espaldas, quien se guarda esputos en su gabardina, quien no para de soltar exabruptos y el cual tiene el único objetivo de casarse con quien cree es la hija de Poe, Wynona Rider.
Una Wynona que interpreta a una adolescente retraída y quien no logra encajar en ningún lugar y menos en su familia, ante un padre calzonazos que no se preocupa por ella, una madrastra snob y más despreocupada aún y un ambiente marcado por el egocentrismo y el postureo, todo son apariencias y oportunidades para lucrarse económicamente.
Un pequeño cliché de la película es el hecho de tener la adolescente marginada que no soporta a su nueva madrastra ni a su padre que desde está con ella solo vive para eso, invirtiendo todo su tiempo y miedo en su nueva relación para no quedarse solo, y la adolescente buscando alguna forma de evadirse y encontrando algo que la "salve", que la purifique y que finalmente acabe aleccionando a sus indeseables padres.
Una obra que cuando no está Michael Keaton en pantalla decae un poco pero que no deja de ser espectacular y única, Tim Burton trayendonos siempre la gótica fantasía que llena su cabeza, PELICULÓN.