Para el inspector Harry Callahan ‘Harry el sucio’ (Clint Eastwood), la fama y la celebridad no forman parte de su estilo de vida, sobre todo cuando éstas interfieren en su trabajo. Pero justo después de meter a uno de los jefes del crimen de San Francisco en prisión, Callahan termina formando parte de una ‘lista negra’, una lista de nombres de personajes famosos que están muriendo misteriosamente: una célebre estrella de rock, un crítico cinematográfico y un presentador de TV. Callahan se entera de que un excéntrico director de cine británico llamado Peter Swan (Liam Neeson) es quien elabora una lista de personas que, poco a poco, van siendo salvajemente asesinadas. El inspector deberá enfrentarse a la atención de los medios, a un asesino a sueldo enfurecido y a un nuevo asesino. Además, deberá encontrar la conexión entre los asesinatos y el autor, aunque no tardará mucho en descubrir que todos los muertos están relacionados con una reportera de televisión llamada Samantha Walker (Patricia Clarkson). Todo ello antes de que el juego pueda ser declarado terminado.
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