Crítica de SensaCine.com para El peso de la corrupción: Engañado

Mark Frost, creador junto a David Lynch de la legendaria serie televisiva Twin Peaks, y de la menos conocida pero también fantástica On The Air, probó suerte en el cine poco tiempo después de finalizar su periplo en televisión. Para su debut eligió los terrenos del thriller, muy de moda en los primeros años noventa.

Con unas expectativas altísimas al tratarse de la primera película dirigida por el co-creador de Twin Peaks, El peso de la corrupción acabó naufragando tanto en la taquilla como en lo artístico. De hecho deber ser tan malo el recuerdo que guarda Frost, que nunca más volvió a dirigir un largometraje para la gran pantalla. Thriller de tintes amarillistas sobre políticos chantajeados, su protagonista, un aspirante a senador demócrata interpretado por James Spader, es un trasunto con unos años de menos de Bill Clinton, presidente de los Estados Unidos en el momento del estreno del filme. De trama inverosímil y desarrollo torpe, el primer y último largometraje de Mark Frost se queda en un intento fallido de poner el dedo en la llaga.

A favor: La excelente nómina de secundarios del filme: Jason Robards, Piper Laurie y Michael Parks, entre otros

En contra: no aporta nada nuevo al género