Tras salir de una época mala personalmente y volver a brillar como siempre en 1980 con "Kagemusha" gracias a Coppola en todo su esplendor, el mejor director de todos los tiempos Akira Kurosawa vuelve a ausentarse otros cinco años pero esta vez para preparar lo que sería su última película de samurais, queriendo terminar para siempre y por todo lo alto el tipo de cine que lo llevo a convertirse en el mejor director de la historia del cine.
Es así como en 1985 Kurosawa estrena "Ran", la cual instantáneamente se convierte aunque parecia imposible otra vez en no solo una de las mejores películas dentro de su filmografia casi perfecta si no que vuelve a hacer de otra película una de las mejores de la historia del cine como lo hacía en los cincuenta y sesenta, creando otro pilar histórico fundamental del cine de samurais y el cine de acción.
"Ran" que traducido al español sería "Caos" lo cual refleja el colapso de la moralidad y el orden no solo es una película sobre el Japón feudal, si no que es una historia filosófica y reflexiva sobre la traición, la condición humana, obviamente el honor de un guerrero samurai y el poder. A su vez es una meditación sobre la futilidad de las guerras y las tragedias de las mismas, tratandolas de un modo caótico, melancólico y destructivo.
Bueno narrativamente es inefable, simplemente sabiendo que es una adaptación libre hecha por Kurosawa de la novela "El Rey Lear" de Shakespeare tenemos suficiente para saber el nivel narrativo de la cinta.
Pero es que con el artístico es casi aún superior, ya que Kurosawa nos prepara para 160 minutos de arte en movimiento con una paleta de colores más que extensa y un nivel de fotografía alucinante, y claro está con una música excepcional.
En vestuario y en maquillaje estamos ante una de las mejores películas de todos los tiempos.
E intepretativamente estamos ante una obra de arte escénica llena de actuaciones sublimes, sobre todo y como mención más que especial la del mítico actor Tatsuya Nakadai, que nos regala una de sus mayores intepretaciones de toda su carrera y eso que su repertorio es de lo mejor del mundo.
La trama esta ambientada en el Japón feudal del siglo XVI y narra la historia de un poderoso señor de la guerra llamado Hidetora Ichimonji (Tatsuya Nakadai), el cual decide dividir su gran territorio entre sus tres hijos. El menor de los tres llamado Saburo (Daisuke Ryū) rechaza el regalo y advierte con enfado que esto será una mala idea que desembocará en una guerra, por lo que Hidetora ofendido deshereda y destierra a su hijo menor y a su fiel acompañante Tango (Masayuki Yui).
Pero pronto los problemas empezaran para el anciano señor de la guerra Hidetora, y las profecías de su hijo menor Saburo se irán haciendo ciertas.
Espectacular final del cine de samurais para "El Emperador" Akira Kurosawa en el regreso con otra de las mejores películas de la historia del cine.