Mi cuenta
    Dirty Dancing 2
    Críticas
    2,0
    Pasable
    Dirty Dancing 2

    'Remake' retroactivo y poco revolucionario

    por Diana Albizu

    Lo más curioso de 'Dirty Dancing 2' es que no se trata de una secuela del famoso romance bailarín de 1987 (el número detrás del título es cosa de la distribución española, el original es 'Dirty Dancing: Havana Nights'), sino de prácticamente un remake que traslada la historia de la alta sociedad neoyorquina de los años 60 hasta la Cuba de los 50 en plena revolución. Esta insólita ambientación (que, por otro lado, termina teniendo muy poca relevancia en el desarrollo del film) se debe a que la película toma como base un guión original de Peter Sagal sobre una historia de amor situada en dicha época.

    La estrategia consistió en convertirlo en la excusa ornamental donde inscribir una recreación del romance entre una joven rica y tímida (Romola Garai) con un talentoso bailarín (Diego Luna), surgido a pesar de sus diferencias de clase gracias al ímpetu pasional de los cuerpos al danzar. Al menos el cameo de Patrick Swayze como profesor de baile invita a tomarse todo con un poco más de sorna, pues si no estaríamos ante uno de los auto-exploits de la historia que menos se aprovecha de su condición parasitaria.

    A favor: La extrañeza por la ambientación en la Cuba revolucionaria.

    En contra: Es una película dramáticamente tan floja como su predecesora y carece de su inexplicable carisma.

    ¿Quieres leer más críticas?
    Back to Top