La trama está contextualizada en el Siglo de Oro, teniendo como foco central de la historia los sucesos acontecidos en las inmediaciones del reino británico. Los acontecimientos giran en torno a Elizabeth Tudor, una hermosa doncella que es la primogénita de Ana Bolena, quien falleciera trágicamente después de que perdiese por completo la cabeza. A partir de ahora el encargado de asegurar su cuidado y manutención será Enrique VIII, rey de Inglaterra y progenitor de la criatura que aspira a cumplir todas las metas que se ha propuesto en su vida.
La situación parece estar perfectamente controlada tanto por el monarca como por cada uno de sus ayudantes, si bien es cierto que su hija empieza a mostrar cierto interés en entablar una relación más allá de la amistad con algún varón de la corte. De hecho, el escenario burgués que rodea y enmarca todos los aspectos del largometraje, unido al extraño y comprometido idilio sentimental que inicia junto con Thomas Seymour, harán que la princesa tome el valor y el coraje suficientes para convertirse en la heredera adecuada al trono inglés.