Crítica de SensaCine.com para Un sueño para ella: De Nueva York a Londres

Siempre han existido estrellas infantiles. Sin embargo, en la actualidad, el nivel de desarrollo de este concepto a llegado a niveles nunca conocidos. Ahora el niño entre 10 y 15 años es el mayor consumidor de la casa. El fenómeno tweenie. Y alrededor de esto han nacido como setas decenas de actores/cantantes/estrellas adolescentes para saciar el ánimo consumista de los niños.

Amanda Bynes fue una de esas estrellas, como muchas otras, fugaces, que terminaron teniendo problemas con el alcohol y la justicia, y que hoy viven retiradas, a la espera de algún regreso triunfal, quizás con un futuro Tarantino. En su apogeo, protagonizó varias películas donde siempre interpretaba el mismo papel, heredado de 'Lo que me gusta de ti', la teleserie que le lanzó a la fama. Una adolescente segura de sí misma, algo bocazas y prepotente, extrovertida y sin miedo al ridículo. En 'Un sueño para ella' interpreta a una norteamericana que viaja a Londres para encontrarse con su padre, un político que está a punto de volver a casarse. El plan de la chica es tratar de evitar que esto suceda, y así reconciliar a sus padres. El trayecto está rellenado con los típicos chistes sobre las diferencias culturales entre norteamericanos e ingleses, la grosería y baja cultura de los primeros, frente al estilo clasista y estirado de los segundos.

A favor: Colin Firth pasaba por allí.

En contra: Parece un capítulo alargado de una serie de televisión.