A finales del siglo XIX, el comisario Guthrie McCabe (James Stewart) es reclamado por el comandante Fraser (John McIntire). El comandante le informa de que varios parientes de los prisioneros blancos que fueron capturados hace años por los comanches han estado exigiendo una operación de rescate, y que ha decidido enviarlo a él, en compañía del teniente Jim Gary (Richard Widmark). A cambio de una promesa de riquezas y buena vida, McCabe accede a perseguir a los comanches y rescatar a los rehenes.
Sin embargo, pronto surgirán las rencillas entre McCabe y el teniente, que no acepta la forma de actuar de su compañero. Por si fuera poco, cuando llegan a los territorios de los comanches y negocian con su líder, se darán cuenta de que no todos los cautivos desean regresar a casa.