Herencias de doble filo
por Bibi RamosComo si se tratara de un complemento en clave femenina para Una mente maravillosa, no hagiográfica y con progenitor encumbrado en el ámbito de las matemáticas, John Madden (Shakespeare enamorado) construye un drama de superación personal, con unos pocos elementos sobrenaturales y con un centro de gravedad focalizado en la incertidumbre que se cierne sobre la protagonista sobre la posibilidad de heredar la patología psiquiátrica paterna.
Madden convoca a un reputado y popular elenco como trío protagónico: Gwyneth Paltrow, Anthony Hopkins y Jake Gyllenhaal, pero su suma no logra que esta descafeinada propuesta que adapta el Pulitzer teatral de David Auburn vuele demasiado lejos. La estructura narrativa del filme lo dota de un ritmo moroso, combinando pasado y presente a través de un montaje en paralelo que no logra en realidad generar un suspense que mantenga al espectador interesado en desvelar su misterio.
A favor: El imprevisto discurso que suelta durante el funeral de su padre.
En contra: El poco gancho de su elección y desarrollo narrativo.