Los antihéroes
por Miguel BlancoEn esta segunda parte del díptico 'Kill Bill', Quentin Tarantino cambió bastante el tono de la primera. Si aquella era desprejuiciada y tendía hacia la acción y el humor negro, en esta conclusión optó por un estilo más reposado. El volumen dos es una película elegíaca sobre unos asesinos que ya no tienen lugar en el mundo, que viven aislados de la sociedad, derrotados tras una vida llena de aventuras. Es el negativo de la primera parte, pues ni siquiera las peleas a espadas son muy expectaculares, lejos del delirio de formas y colores de la parte asiática de la primera entrega. Como siempre, la película funciona en la parte técnica, con una selección musical muy arriesgada que empieza con Nancy Sinatra y termina con la Malagueña salerosa.
Sin embargo, este cambio de registro tan pronunciado, puede resultar contraproducente, ya que Tarantino pierde la libertad formal de la primera entrega para llevar a la película por terrenos mucho más convencionales. El director termina el díptico 'Kill Bill' con un algo tonto elogio de la maternidad, lo que decepciona bastante tras los riesgos tomados en la película precedente.
A favor: Un desfile de héroes crepusculares.
En contra: Que termine de manera tan convencional.