Michael Radford tuvo que cortar el beso entre Antonio y Bassanio para que pudiese ser emitida por televisión.
Las prostitutas con el pecho descubierto no se añadieron para llamar la atención, sino para dar autenticidad histórica. En aquel momento, las leyes de Venecia obligaban a las prostitutas a enseñar el pecho porque las autoridades cristianas estaban preocupadas por la homosexualidad en la ciudad.
Dustin Hoffman se interesó por el papel de Shylock, sin embargo, cuando contactó con el director Michael Radford, Al Pacino ya había asistido al casting.
Ian McKellen iba a ser el actor que encarnara a Antonio, pero renunció en el último momento por problemas de horarios.
El papel de Portia iba a estar interpretado por Cate Blanchett, pero renunció a ello al enterarse de que estaba embarazada.