Amor de madre
por Virginia MontesTras varios cortometrajes el cineasta francés Martial Fougeron debutó en la dirección con la que es hasta el momento su única película, 'Mi hijo', sorprendiendo con una historia de planteamiento inicial en apariencia simple pero que según avanza, en escasos ochenta minutos, va desarrollando una gran tensión y una atmósfera malsana en crescendo.
Fourgeron trabaja la psicología de sus personajes y apuesta por una puesta en escena austera, directa y seca para observar cómo una madre (Nathali Baye) y su hijo establecen una relación de amor/odio y de posesión que alcanza altas cuotas de crueldad. Fougeron evita el caer en lo explícito y truculento para trazar una mirada sólida y reflexionada sobre una relación materno-filial que nada desmerece a Bataille. Fougeron logra introducir al espectador en la historia, hacerle partícipe de manera paulatina de los sucesos. Queda, quizá, la sensación de que en determinados momentos el cineasta francés juega demasiado con sus personajes, que al final la idea, aun siendo una película de poca duración, daba más para un mediometraje. Pero 'Mi hijo' es una rareza que debería haber atraído más atención en su momento y que debería también ser redescubierta.
A favor: Los actores y el trabajo formal del director.
En contra: Que su aspecto de película pequeña ocasione que pase desapercibida.