Es 1959, un desastroso productor de Broadway, Max Bialystock, y su contable Leo Bloom hacen cuentas sobre el beneficio de sus obras. Terminan elaborando un plan, que será una de las mayores estafas del mundo del teatro. El proyecto consiste en producir un pésimo musical invirtiendo lo mínimo, llamado la 'Primavera para Hitler', y ganar ingentes cantidades de dinero para después escapar del país con el botín.
Más moderna pero menos mordiente
por Virginia Montes