Crítica de SensaCine.com para Te doy mis ojos: Chantaje emocional

La corriente del realismo social que impregnó cierto cine español durante los principios de los años 2000 tuvo en ‘Te doy mis ojos' una de sus cotas más celebradas. Icíar Bollaín se atrevió con el maltrato doméstico (o violencia machista) en este filme de corte austero y muchas ambiciones. La primera, querer tratar un asunto tan espinoso desde los dos puntos de vista, el del marido y el de la mujer, poniendo en situación las distintas fases por las que transita una pareja inmersa en el espiral de la violencia y las dudas. El resultado acaba por conformarse como un fresco ambiguo y no exento de cierto chantaje emocional para con el espectador (sobre todo su escena final, un cara a cara de la pareja estremecedor), y si algo merece ser destacado sin peros es la profunda actuación de Laia Marull y Luis Tosar, todo química y desaliento.

A favor: La pareja protagonista. Actuaciones sobresalientes.

En contra: Que para tratar el maltrato psicológico Bollaín haga uso de cierto chantaje emocional con el espectador.