Crítica de SensaCine.com para Contra la pared: La noria de los sentimientos

Los protagonistas de ‘Contra la pared' se conocen en un hospital, ambos han intentado suicidarse. Cahit (Birol Ünel), que no ha superado la muerte de su esposa, ha entrado en una espiral autodestructiva y ha estampado su coche contra la pared. Sibel (Sibel Kekilli) no puede soportar más la presión de su tradicional familia. Ambos viven en Alemania pero son de procedencia turca y Sibel piensa que si se casan, ella obtendrá por fin su ansiada libertad.

El filme explora la compleja relación entre estos personajes, llena de altibajos, igual que la propia película que está llena de momentos hermosos pero también de escenas ridículas. El filme tiene la virtud de no recurrir a la moralina en ningún momento, su problema es otro: Akin intenta construir una historia demasiado perfecta de destrucción y redención, lo cual hace que, especialmente su tercio final, la película empieze a resultar previsible y repetitiva.

A favor: Las escenas en que los personajes se liberan al ritmo de la música.

En contra: El recurso de la cámara lenta y otros tics del estilo de Akin.