Los productores Horberg y Rebecca Yeldham, se quedaron literalmente enamorados de la novela, habían comprado los derechos hasta antes de su triunfo: "era una de las piezas más poderosas y más cinematográficas que he leído. Era mágico. Nos quedamos tan tocados que no podíamos imaginar no hacer esta película".
En varias de las escenas en las que los niños están volando cometas, ellos en realidad estaban volando globos, las cometas se insertaron en la post-producción.
La familia del actor Ahmad Khan Mahmidzada intentó retirar la escena de violación de la película.