En busca de una nueva oportunidad para Reynolds
por Rodolfo SánchezEl cineasta Bill Forysth creó durante la década de los ochenta una serie de obras medianas pero muy interesantes, como Un tipo genial o Housekeeping, pero nunca logró que su personalidad como director fuera más allá y su carrera nunca despegó apagándose muy pronto. Una de sus últimas películas fue Un ladrón y medio, con guion de John Sayles y al servicio de un Burt Reynolds que intentaba recuperar aquel lugar que una vez ocupó en el cine. De hecho, su papel en Un ladrón y medio recuerda mucho a sus personajes de los setenta en esa mezcla de aventurero canalla que tanta fama le dio. Y que tuvo retuvo y algo queda en la producción de Forysth, aunque se trata de una película menor, con gracia y dinamismo, fácil de ver, pero demasiado plana en su planteamiento visual. El guion de Sayles juega bastante bien con la comedia y la acción pero falla en su falta de riesgo. A pesar de su irregularidad y su falta de nervio, resulta una historia simpática y sencilla de ver.
A favor: Reynolds logra dar personalidad a su personaje.
En contra: Que es demasiado convencional.