Woody Allen vérité
por Nestor HidalgoDespués de homenajear al expresionismo alemán en 'Sombras y niebla' (1991), Woody Allen decidió volver a una de sus recurrentes historias urbanas con Nueva York de fondo y adultos neuróticos con problemas de autoestima, satisfacción sexual y, en general, capacidad para encontrar su rumbo en la vida. Sólo que, en esta ocasión, apostó junto al director de fotografía Carlo Di Palma (su habitual de la época) por la cámara en mano y el seguimiento directo de las conversaciones, fijándose en el estilo liviano y directo de John Cassavetes a la hora de acercarse a los personajes.
Cuenta la historia de dos parejas maduras (Sydney Pollack con Judy Davis y Woody Allen con Mia Farrow, cuyo matrimonio en la vida real acabó poco después del rodaje) que atraviesa distintas crisis en sus matrimonios, experimentando con rupturas, relaciones con otras personas, flirteos condenados al desastre, etc. Frente a anteriores y posteriores variaciones sobre temáticas similares, 'Mujeres y maridos' juega de forma resultona con la baza de la novedad formal, potenciando los planos secuencia y el regodeo actoral; algo que, cuando se cuenta con buenos intérpretes y Allen inspirado a los diálogos siempre es digno de aplauso y agradecimiento.
A favor: En un viaje en taxi, el personaje de Juliette Lewis verbaliza todas las críticas que habitualmente se hacían al cine de Allen.
En contra: La frescura de la cámara en mano corre el riesgo de quedar como un gimmick más que una decisión de estilo.