Imprescindible película iraní
por Rodolfo SánchezEn cinco años, ente 1995 y 2000, el director iraní Jafar Panahi enlazó tres excelentes películas: El globo blanco, El espejo y El círculo, a las cuales han seguido otras obras que han certificado que el gran Abbas Kiarostami no es, afortunadamente, la única voz del cine iraní.
Y, además, lo ha hecho con un sello personal y una mirada única, aproximándose a la complejidad social y política de su país de manera directa, sin ornamentos, observando y entregando unas obras honestas que su aparente frialdad formal esconde, en realidad, un enorme nervio narrativo. Su elección por una puesta en escena objetiva, medida, de planos cuidados y en los que cada detalle cuenta para dar claves del conjunto, hacen de El espejo una obra de cámara que, en su aparente intimidad, revela en sus imágenes la situación de una sociedad, el lugar que ocupa cada ciudadano. Y hace importante tanto aquello que vemos como lo que sucede en los márgenes de la narración, creando una historia tan conmovedora como incisiva, que en cada visionado revela más y más cosas. Imprescindible.
A favor: Todo, la dirección, la joven actriz...
En contra: Que los prejuicios hacia el cine iraní