Muchas escenas fueron dibujadas pero no llegaron a editarse. Entre ellas se incluyen una escena en la que Gastón visita el asilo y otra escena donde se ve la Bestia arrastrando el cadáver de un animal que había matado. Las ideas fueron retiradas porque consideraban que eran demasiado fuertes para la película.
La película está dedicada a Howard Ashman, el letrista, que murió antes de la finalización de la película. Al final de los créditos finales, se puede leer la dedicatoria: "A nuestro amigo Howard, quien dio a una sirena su voz y a una bestia su alma, te estaremos eternamente agradecidos".
La película utilizó 1.295 fondos pintados y 120.000 dibujos. 370 personas trabajaron en esta producción.
En la década de 1930 y de nuevo en la década de 1950, Walt Disney intentó adaptar 'La Bella y la Bestia' a una película de animación, pero no pudo llegar a un tratamiento adecuado, por lo que el proyecto fue archivado. Hasta que 'La Sirenita' se convirtió en un enorme éxito, no decidieron probar por tercera vez.
En su versión original, Angela Lansbury, la voz de la Sra. Potts, pensó que sería más adecuado que otro personaje cantara la balada "La Bella y la Bestia". El director le pidió que hiciera al menos una grabación para tener una copia de seguridad si nada más funcionaba. Su versión gustó tanto que fue la que se incluyó finalmente en la película.