El famoso cruce de piernas de Sharon Stone casusó sensación y motivó un rifi-rafe entre la actriz y el director. Ella relató que accedió a rodar sin ropa interior a petición de él, quien le había engañado diciendo que la luz de los focos hacía muy evidente dicha prenda. La actriz accedió a quitársela suponiendo que la iluminación sería más tenue, pero en un visionado del filme ya terminado, apreció claramente que su pubis quedaba muy visible y en una reacción airada, abofeteó a Verhoeven y abandonó la sala.
La bisexualidad del personaje de Sharon Stoene provocó protestas de asociaciones de lesbianas, que consideraban que la película proyectaba una imagen negativa de ellas.
No se hizo uso de ningún doble para rodar las escenas de sexo entre Douglas y Stone.
Douglas y Stone tuvieron que usar almohadillas genitales para rodar la escena sexual debido a la epidemia de SIDA que hubo a principio de los noventa.
La escena de cama entre Michael Douglas y Sharon Stone tardó en rodarse 5 días.
Una de las cláusulas escritas en el contrato de Michael Douglas especificaba que estaba prohibido filmarle desnudo por la parte frontal del cuerpo.