Ajuste de mitos
por Bibi RamosTras haberse labrado una reconocida trayectoria como actor, vinculado a tipos duros como Harry Callahan, y al “hombre sin nombre” de la trilogía del dólar a las órdenes de Sergio Leone, el californiano Clint Eastwood comenzó a destacar en los setenta también tras las cámaras y firmó, en 1992, uno de los más grandiosas westerns crepusculares de la Historia del Cine, galardonado con cuatro Óscars.
El ex pistolero y viudo William Munny, al que el mismo Eastwood interpreta, vuelve al ruedo forzado por las circunstancias económicas en que se encuentra su familia. Para ello se reencontrará con un viejo amigo, Ned Logan (Morgan Freeman), y juntos partirán en busca de los responsables de haber desfigurado a una prostituta. El impecable guión de David Webb Peoples está estupendamente filmado e interpretado y aborda con pasión y astucia la decadencia de un género cinematográfico a la vez que cuestiona las raíces y vestigios del mito sobre el que se asienta parte de la cultura norteamericana.
A favor: Su sobresaliente guión, su composición de personajes, los diálogos memorables entre estos…
En contra: Algún secundario.