Madurez acelerada
por Nestor HidalgoDespués del relativo fracaso de 'Kafka, la verdad oculta' (1991), Steven Soderbergh buscó un poco de cobijo con una propuesta mucho más ortodoxa adaptando una novela de iniciación de A. E. Hotchner que se desarrolla durante los años de la Gran Depresión. Con la producción de época ya trabajada en su filme anterior, Soderbergh se limita a sacar lo mejor posible del libro original sin intentar dejar una firma propia demasiado patente.
La elegancia en los encuadres y el brío narrativo están ahí, así como la fotografía meticulosa (pese al trágico relato de pobreza y escasez, toda la película exuda calor y candidez), pero los cauces de la bildungsroman canónica (voz over narradora incluida) no se mueven ni un ápice. En cuanto al reparto, el joven protagonista Jesse Bradford hace un buen trabajo, pero no todos los personajes adultos con los que se encuentra están a la altura de las circunstancias. Destaca para mal Adrien Brody, encasillado en su registro pícaro y de vuelta de todo. Como nota curiosa, también contiene el casi debut de Katherine Heigl, con 15 años.
A favor: Lauryn Hill mascando chicle en el ascensor.
En contra: El potencial de Soderbergh está infrautilizado.