Así serían los personajes de diferentes animes si fueran parte del universo 'Dragon Ball'. ¡Hasta sale Satoru Gojo!

Lo ha hecho una máquina, no creáis que Akira Toriyama estuvo dándole que te pego

Hace años, antes de que Dragon Ball empezara a publicarse en España en la mítica edición amarilla, los adolescentes españoles iban a los salones del manga a intercambiarse fotocopias en japonés. De poco importaba no entender nada de lo que estaba pasando o incluso que fueran tan copia de copia que apenas se viera nada: era Dragon Ball, y era más importante que todo, fuera como fuera. ¡Incluso se llegaron a hacer varios fanzines con este material amateur que se vendían como churros! Había emoción, ganas y curiosidad por una obra apasionante. Eso no es lo que traigo hoy.

Vamos con (poco) afán

Desde el nacimiento de la inteligencia artificial generativa, hacer crossovers al estilo "camiseta de La Tostadora" se ha hecho muy fácil. Basta decir que quieres un personaje con los trazos de un dibujante para que la máquina robe un poco de uno y de otro para hacer su versión sin alma ni chispa. Antaño, esto lo haría un ser humano queriendo ofrecer algo diferente a Internet, pero ahora es la obra de un ladrón de arte gigantesco y absurdo que no entiende cuál es el mérito o lo divertido de estos crossovers.

Así que sí: si siempre habíais tenido curiosidad de cómo habría dibujado Akira Toriyama a personajes como Ash Ketchum de Pokémon, L de Death Note, el protagonista de Inu Yasha o incluso Satoru Gojo de Jujutsu Kaisen, la máquina ha cumplido vuestros deseos. Obviamente solo se parece a Toriyama en la superficie (los ojos, el pelo loco, la forma de la cara, los músculos), pero la máquina no conoce el estilo de Dr. Slump ni el resto del trabajo del mangaka, por lo que el resultado no es fehaciente, útil ni interesante en absoluto.

Por suerte, Akira Toriyama era mucho más que Dragon Ball, y eso es algo que una máquina jamás entenderá. Porque las máquinas nunca serán mucho más que un generador automático de imágenes suficientes pero nunca sobresalientes, capaces de hacer carteles para fiestas de cumpleaños pero no portadas que emocionen o cómics donde poder vernos reflejados. Quien diga que esto es el futuro es porque debe tener una imagen muy mediocre del futuro: posiblemente la habrá hecho una IA.