Tras su permiso, las presas vuelven a la cárcel, donde todo sigue siendo un caos tras la escapada en masa. El caos está lejos de acabar: un nuevo grupo de reclusas llega a la prisión; algo que afecta a todas las presas anteriormente recluidas.
Piper, mientras tanto, ha dado un paso adelante en su lucha por el mandato. Tras desvincularse de las latinas, decide lanzar un grupo propio, en el que ella es la líder. Alex deberá enfrentarse a un guarda nuevo que viene a acompañarla en el invernadero. Healy centra su interés en Lolly, por la semejanza de la misma con su madre.