SensaCine
Mi cuenta
Lo imposible se ha convertido en una realidad. Charlie Harper es un hombre asentado y todo ha sido gracias a Chelsea. El amor que Charlie profesa por la joven es tal que intentará todo lo posible por caer bien a sus padres; fingir que escucha mientras el resto del mundo habla e, incluso, ser fiel.
Mientras tanto, Alan ha llegado a la conclusión de que todos los problemas que tiene con las mujeres derivan del poco pelo corporal con el que cuenta. Para ello, utilizará un spray con efectos inesperados. Además, Jake se sumerge en el mundo de las citas y pide consejo a Charlie.
22 episodios
Cadena original CBS
Emitida desde: 21 de septiembre de 2009
1 foto
Ver reparto completo de la temporada 7
Ver todas las fotos de la temporada 7
Mia se encuentra con Charlie y le pide que le ayude con unas canciones a las que se tiene que enfrentar. Aunque este se niega, Chelsea le convence de que, si no siente nada por Mia, no debería tneer ningún problema ayudándole. Por su parte, Alan y Melissa reanudan su idilio, llegando a provocar que Charlie se pregunte si esta se ha mudado con ellos.
Chelsea consigue convencer a Charlie para que deje que Melissa viva con ellos. Esto resulta ser un error fatal para los hombres. Las dos chicas se apoderan de la casa, provocando que, progresivamente, Charlie comience a vivir en un hotel, y Alan deba hacer lo mismo. Para recuperar la casa, los hombres deberán recurrir, precisamente, a una mujer: Evelyn.
Alan cuida del bebé de Judith y de su ex suegra, mientras Judith y Herb intentan pasar una romántica escapada juntos. Por su parte, Charlie atropella, de forma accidental a un gato que creen que podría ser Sir Lancelot, la mascota de Chelsea. Jake toma una foto de la escena y amenaza a su tío con enseñarla si este no le deja conducir su Mercedes.
Alan está harto de no tener un lugar propio en el que intimar con Melissa. Ante esto, decide aceptar un trabajo ofrecido por Evelyn que, sin embargo, le quita tiempo con su novia. El último encuentro de la pareja lleva a Alan al límite. Por su parte Charlie hace que Jake y Chelsea se reunan para intentar lidiar sus diferencias.
Jake está aprendiendo a conducir. Durante este período, Charlie y Alan han estado discutiendo sin parar. Cuando una de estas trifulcas pone en ridículo a Jake, este se niega a pasar ningún fin de semana más con los hermanos. Ante esto, Charlie y Alan deberán tratar de encontrar la forma de que Jake regrese a su casa y, además, de solucionar sus propios problemas.
Chelsea sufre de dolor de espalda. Para poder librarse del mismo, Alan sugiere que se someta a una operación de reducción de pecho, algo que no hace ninguna gracia a Charlie. Este echa a su hermano de casa y trata de convencer a su novia para que no participe en la operación. Por su parte, Alan comienza a vivir con Evelyn.
La boda de Charlie y Chelsea, finalmente, tiene una fecha para su celebración. Evelyn se ofrece para encargarse de todo. Charlie y Alan se emborrachan, esa misma noche, y cuando se despiertan, se dan cuenta de que están en la cama con una desconocida. Jake y Chelsea, por su parte, tienen una conversación sobre el pasado de Charlie.
Chelsea invita a la casa a Gail, una atractiva compañera de la universidad, que trata de superar la ruptura con su ex novio. Ante esto, Charlie lucha contra sus instintos, preguntándose si quizá es una especie de prueba que tiene que superar para ganarse la confianza de su futura esposa. Por si acaso, Berta le propone a Charlie la solución definitiva: tratar de conquistarla como lo haría Alan, algo que, seguro, le llevará al desastre.
Charlie se muestra preocupado cuando se entera de que no ha estado satisfaciendo, sexualmente, a Cheslea. Este decide analizar los problemas y llegar a una solución. Alan, por su parte, trata de evitar que su calvicie se extienda, utilizando un producto capilar barato. El pequeño de los Harper se da cuenta de que el dicho de que "lo barato sale caro" resulta ser cierto.
Charlie y Chelsea deciden acudir a clases de baile para poder ofrecer un buen espectáculo en su enlace. Sin embargo, Charlie se da cuenta de que su futura esposa posee unas propiedades que la hacen más rica aún que él. Por su parte, Alan, lleno de recuerdos, enseña a Jake el viejo vídeo de su boda con Judith.
La novia de Jake, Celeste, se marcha de la ciudad por Navidad. Ante esto, Charlie aconseja a su sobrino ponerle los cuernos con una joven que ha conocido en la playa. Sin embargo, Celeste regresa antes de tiempo, lo que pone en un gran aprieto a Jake y a su tío. Por su parte, Evelyn lleva a un rostro televisivo a la cena de Charlie, con el objetivo de conseguir su fabulosa mansión.
Jake intenta reconquistar a su novia cantándole canciones de amor. Charlie recomienda a su sobrino que se disculpe en persona y este, a pesar de seguir enfadado con su tío, le hace caso. Cuando esto sale mal, Charlie afirma que pronto encontrará a una chica decente. Por su parte, Alan y Herb conectan de tal manera que trabajarán juntos para evitar que Judith se entere.
Charlie está a punto de conocer a los padres de Chelsea. Para evitarlo, decide someterse, voluntariamente, a una colonoscopia. Cuando esta se entera, decide traer a sus padres directamente a Los Ángeles. Este encuentro no será especialmente bueno para el devenir de la pareja, una vez que Charlie se entere de un profundo secreto de Tom, el padre de Chelsea.
Alan golpea a un hombre en el bar, de form accidentada. Ante esto, contactan con Brad Harlow, el abogado del mismo, algo que preocupa a Charlie ya que Chelsea podría sentirse atraída por el mismo. Sin embargo, este afirma ser un hombre de familia e invita a la pareja a acudir a un evento benéfico. Presumiendo de orgullo, Charlie se niega a ir, algo que le hace pensar si su novia será capaz de serle infiel.
Cuando Chelsea regresa de su encuentro con Brad, Charlie se muestra lleno de celos. Ambos tienen una discusión que provoca que la mujer abandone la casa de su prometido. Ante esto, Charlie ahoga sus penas en el alcohol. Al día siguiente, Chelsea propone a su prometido encontrarse en una cafetería. Este acepta, a pesar de padecer una gran resaca.
Un Charlie, totalmente deprimido por su ruptura con Chelsea, se escapa a Las Vegas. Tras una noche de desenfreno, el mayor de los Harper regresa a casa con una nueva esposa... que no es Chelsea. La afortunada se llama Betsy y resulta ser una mujer ya casada que, sin embargo, cuenta con el beneplácito de su marido para tener relaciones espontáneas.
Chelsea comienza a salir con Brad. Charlie espía a su ex prometida, con la ayuda de Alan, y consigue acostarse con ella. Ante esto, los dos sopesan si ha sido una buena idea dejarlo. Charlie trata de reconquistarla haciendo caso a los consejos de su padre y de su hermano. Este confiesa a Alan que está contento por tenerle en casa.
Charlie tiene un encuentro amoroso con Gail, una de las amigas de Chelsea. Cuando se entera de que su ex prometida está teniendo problemas con su novio, decide reconquistarla. Esta, sin embargo, se entera del idilio de Charlie y se enfurece. Por su parte, Alan se da cuenta de que es capaz de dar placer a una mujer dando simples masajes de espalda. Este se preocupa cuando comienza a pensar que, quizá, está ejerciendo de gigoló.
El nuevo amigo de Jake, Eldridge, convence al joven para que robe cerveza de su tío, se emborrachen y se escapen aún cuando estén castigados. La influencia de Eldrige es tan grande que consigue burlar, incluso, a Charlie. Por su parte, Alan parece estar interesado en la figura del amigo de su hijo, aunque concretamente, más en la de su madre, Lyndsey.
Eldrige interrumpe un encuentro secual entre su madre y Alan. Ante esto, el pequeño de los Harper organiza una romántica velada en un hotel. Sin embargo, nada sale como lo previsto, dado que Lyndsey sufre una dolorosa menstruación. Por su parte, Charlie contrata a una prostituta para saber qué es lo que significa tener una novia real.
Charlie comienza a padecer de insomnio, por lo que tiene que acudir a un farmacéutico para que le ayude a dormir. Este le ofrece una droga que, al fumarla, hace alucinar a Charlie. Alan y Jake, por su parte, viajan a Sacramento para conseguir una vieja reliquia de la familia. Sin embargo, el desastre les acompaña en los asientos de detrás.
Jake, actuando como chófer de Charlie, realiza una imprudencia al volante. Ante la posibilidad de que la policía pueda inculpar a su sobrino, este se cambia de sitio con Jake para asumir toda la culpa. Como resultado, Charlie pierde su carnet de conducir. Por otro lado, Alan acude a la fiesta de Chelsea, ofreciéndole un sentido regalo de parte de su hermano.
