Tras sobrevivir a los peligros que encerraba la isla tras su accidente, el equipo de Scorpion está listo para seguir ayudando al mundo. La boda y luna de miel de Toby y Happy ha pasado pero los peligros acechan. La vieja némesis del grupo, Mark Collins, ha vuelto a la vida de los protagonistas con su objetivo intacto: destruir la idea de humanidad tal y como se conoce.
El deber seguirá llamando a la puerta del equipo en todo tipo de festividades, pasando por Halloween o Navidad; y les exigirá tanto que deberán librar un partido de softball o, incluso, llegar a cantar.