Continúan las conspiraciones y la lucha por el poder de la familia Roy. Mientras Kendall intenta reconciliarse con su padre, Roman compite con su hermano para demostrar que él también puede liderar Waystar. Por su parte, Shiv empieza a dudar de su padre, cree que podría estar manipulándola. Con la tensión ante la posible compra de una compañía rival, Logan sopesará si debe sacrificar a un miembro de la familia o a un alto cargo para salvaguardar la dañada reputación de la compañía. El peligro se cierne entonces sobre Tom, el marido de Shiv, que afronta una investigación interna dentro de la empresa familiar para la que también trabaja.