Belmonte aún no ha asimilado el asesinato de Iván. Por si fuera poco, Néstor, el presunto autor del crimen, continúa en paradero desconocido. Mientras, Macarena y Ana mantienen en secreto que ellas asesinaron a Néstor y se deshicieron de su cadáver tirándolo a una cantera. Y cuando pensaban que nadie las descubriría, llega a sus oídos que la policía ha encontrado el cadáver, descompuesto y envuelto en cal, en una cabaña abandonada. Aunque el cuerpo está irreconocible, sospechan que es Néstor porque lleva en su mano su anillo. Ahora deben iniciar una investigación para averiguar la identidad del cuerpo y si los vecinos de la zona ocultan algo.