El agente del FBI Peter Sutherland (Gabriel Basso), encargado de una línea de emergencia del gobierno, recibe una llamada de socorro. Cuando le ordenen que proteja a Rose Larkin (Luciane Buchanan), una experta en ciberseguridad, ambos agentes se verán obligados a investigar, mientras les pisan los talones, y sus vidas estén en grave peligro al hacer algunos descubrimientos alarmantes. Lo que no se imaginan es que acabarán involucrados en un complot relacionado con un topo en la Casa Blanca.