Tres años después de los sucesos de la primera temporada, María sale de prisión dispuesta a rehacer su vida y a recuperar todo lo que se ha perdido durante este tiempo. Su objetivo es buscar un trabajo estable, y alejarse para siempre de ese mundo de excesos que supuso su descenso a los infiernos. Pero no tarda en darse cuenta de la cantidad de obstaculos que debe superar, únicamente por ser una exconvicta. Aunque lo que más le duele es haber perdido a sus amigas, y sentir que está sola.