Scott Calvin está a punto de cumplir 65 años. Después de casi 30 años como Santa Claus, se da cuenta de que no va a poder ser Santa para siempre. Aunque él sigue tan alegre como de costumbre, resulta que la popularidad de la Navidad ha decaído, y también su magia. Scott se propone entonces encontrar un digno sucesor de Santa, mientras prepara a su familia para una nueva aventura en la vida al sur del polo.