En la España de los años 60, María es una joven que, tras la muerte de su padre, sacrifica sus propios sueños para asegurar el bienestar de su familia, aceptando casarse con Ramón, un terrateniente mucho mayor que ella.
Tras mudarse a La Mancha, María descubre que la verdadera convivencia será con Manuel, el joven y arrogante sobrino de su nuevo esposo. Mientras su ilusión por ser feliz se desvanece, la inesperada reaparición de José, su amor de juventud que emigró a Alemania años atrás, despertará en ella sentimientos que creía olvidados, obligándola a replantear su vida y sus decisiones.