11 de marzo de 2004, un terrible atentado en la ciudad de Madrid conmociona toda España, se trata del mayor atentado yihadista cometido en suelo europeo. Aquel año, Gabriel Montoya Vidal, Baby, era un adolescente de dieciséis años que, junto a Emilio Trashorras, participó en el traslado de los explosivos que se usarían en Madrid. Baby fue el primer condenado por los atentados. Su testimonio fue clave en el macro juicio que tuvo lugar en 2007.